Estos últimos días me he dedicado a pasear y a leer, así que he tejido poco. Tengo la vista chamuscaílla de tanto ordenata, los días se alargan, me apetece tomar más el aire, y estoy cansada de tanto sofá.
Además, Blanquito lleva una temporada activa de novias, así que se escapa a la mínima oportunidad, y yo tengo que ir al rescate. Hasta le he tenido que escribir una especie de romance de ciego -explicando que no está perdido, ni abandonado, ni maltratado, sino que está rondando a fulanita en la calle tal y numero cual, y que dentro de un rato sus dueños irán a buscarlo- y colgársela del cuello en una vieja acreditación de congreso.
Aquí debe de estar soñando con alguna de sus “amigas”.

Aún así, he tenido tiempo de comprar lana de colores para futuros proyectos.


Me han llegado dos libros, y he conseguido el Marie Claire Idées de primavera.

El libro Kristin knits de Kristin Nicholas es una pasada, con mucho color y mucha imaginación. Y tiene un “knit- a- long” y un grupo en Ravelry.
Y he comprado algunas lanas y agujas para calcetines en Ewa’s Sockenwolle.

Estas agujas de Knitpicks son curiosas, porque van seis en cada juego, así si se “despista” alguna –cosa que a mí me suele suceder- hay una más para seguir tejiendo. Y tienen 15 cm que es la medida que me resulta más cómoda para tejer calcetines. Los marcadores con forma de corazón y la mano vinieron de regalo, junto con unas gominolas que ya no existen.
Ahora espero encontrar inspiración para empezar los Swapetines.