Y si hay riachuelos mucho mejor.
Y un sapo.
Ya que estoy, y como Pilar se queja de que me prodigo poco, os enseño la chaquetita del otro día ya acabada.
Esta hecha a ganchillo, en algodón 100% del nº 8, en color crudo, comprado al peso en una de las plazas más típicas del centro de la ciudad.
Es un material superagradable, natural, de una empresa de un pueblo cercano, y es el que se ha utilizado por aquí toda la vida para tejer ropa para niños, medias, ropa interior, rebecas… de verano. Solo lo tienen en blanco y en crudo, y en tres grosores, pero estoy pensando que igual el color crudo -que no lleva tratamiento blanqueante- se puede teñir con algún tinte vegetal. Además tiene muy buen precio.